Hay ciudades cubanas que nos cuentan sus historias sin necesidad de guía turística, derramadas en portales coloniales, verjas centenarias, calles empedradas y luminosos vitrales. Son espacios seductores, que parecerían encapsulados en burbujas del pasado. Pero es la apuesta de una interacción responsable entre preservación y visitantes lo que las convierte en tesoros asequibles a cualquier viajero.
La Isla ostenta el primer lugar del Caribe y el 26 del mundo entre los 190 Estados Partes en la Convención del Patrimonio Mundial; guarda ya 13 designaciones de este tipo.
Ciudades patrimoniales en Cuba
¿Cuáles son las ciudades patrimonio de la humanidad en Cuba? Comienza a anotar, pues te hemos preparado un breve recorrido de Oriente a Occidente por estos lugares, de fisonomías tan heterogéneas como fascinantes. Y si te dejas tentar con estos destinos, dotados de una privilegiada herencia histórica y cultural, quédate en Tramison y permítenos gestionar tu viaje.
Baracoa
La Ciudad Primada, fundada en el sitio que pisó Colón por segunda vez en Cuba durante su viaje de encuentro con las Américas. Rodeada de mar, protegida por paradisíacas montañas y atravesada por ríos, hay allí más de 60 sitios arqueológicos de la hoy extinta civilización taína. En algunas de sus comunidades, incluso, es posible reconocer en los rostros de sus actuales habitantes rasgos físicos de los antepasados indígenas.
A la Villa de la Asunción de Baracoa durante muchos años solo se pudo acceder por el Caribe, de modo que sus tradiciones se fortalecieron, fueron menos expuestas al mestizaje ocurrido en el resto de la Isla. Las tradiciones culinarias del lugar te lo van a confirmar.
Bayamo
Aquí se respira la veneración a los monumentos. Su Capilla de los Dolores, erigida en 1740, fue el único lugar que se salvó del gran incendio de 1868, al inicio de las guerras por la independencia de Cuba. Allí está también el primer cementerio al aire libre que se construyó en la Isla y en su plaza central se encuentra una de las catedrales más hermosas que se puedan admirar en esa geografía.
Atrévete a recorrerla en coches tirados por caballos, todavía hoy un medio de transporte empleado en la ciudad, donde el tiempo transcurre un poco más lento.
Camagüey
Santa María del Puerto del Príncipe, la ciudad laberíntica en la que perderse es, quizás, parte de las experiencias más intensas para los visitantes primerizos. La arquitectura religiosa tuvo su fuerte en este centro, con 14 iglesias prácticamente conservadas sin alteraciones a las estructuras originales.
También conocida como la Ciudad de los Tinajones, conserva un espléndido conjunto erigido entre el siglo XVIII y XIX —de la Parroquial Mayor, las iglesias de Nuestra Señora del Carmen y Nuestra Señora de la Merced, la de Santa Ana, la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús y las parroquias de la Soledad y la Caridad— en un perímetro de la ciudad perfectamente caminable.
Trinidad
Esta es, sin duda alguna, la villa colonial mejor conservada de Cuba, con más de 500 años. Le llaman la ciudad museo, también por el cercano Valle de los Ingenios, que atesora reliquias de la industria azucarera del siglo XVIII. Actualmente se encuentra declarada también Ciudad Artesanal del Mundo, por el esfuerzo de preservación de las tradiciones hilanderas y de alfarería.
Se trata de uno de los exponentes arquitectónicos más diversos, hermosos y mejor conservados de América Latina. Y otro tip: si deseas noches más movidas, puedes visitar el único club nocturno del país ubicado dentro de… ¡una cueva!
Sancti Spítitus
Justo en las márgenes del Río Yayabo se fundó esta villa. El puente que atraviesa el afluente es el elemento que la identifica, único de arcos abovedados en el país y emblema de la ciudad. Un pequeño y fascinante centro histórico le hace compañía de cerca. Y en las orillas del protagónico río, la vida cultural de sus pobladores ha encontrado el terreno más fértil.
Remedios
Puedes llegar a este destino en cualquier época del año; esto es cierto. Pero dejar pasar la oportunidad de visitar la plaza de Remedios un 24 de diciembre es perderse la mayor parte de la diversión. Esa noche se celebran las Parrandas, la más espectacular fiesta popular de fuegos artificiales que se realiza en Cuba.
Desde que cae el sol hasta que amanece, con una energía inagotable, los pobladores de los barrios del Carmen y San Salvador, compiten con elaboradas carrozas, trabajos de Plaza y diseños de luces multicolores por ser los ganadores de la mejor visualidad y creatividad de la noche.
Cienfuegos
Llegamos a “La Perla del Sur” y “La Linda Ciudad del Mar”, y es fácil imaginar el porqué de los epítetos. La ciudad de Cienfuegos es la única urbe cubana fundada por los franceses, la de mejor trazado urbano, y la única de América, entre las fundadas en el siglo XIX, declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad. Si optas por llegar, regálate un atardecer en el Malecón cienfueguero, o la vista desde la azotea del Museo-Fortaleza Nuestra Señora de los Ángeles de Jagua.
La Habana
El punto de llegada y de partida fundamental, desde 1519, cuando fue fundada la villa de San Cristóbal de La Habana. El Malecón es el muro más icónico del país, donde se reúnen como en un largo abrazo el centro histórico, la contrastante Centro Habana y la zona más moderna de esta Ciudad Maravilla. Entre sus muchas riquezas, las personas que la habitan es su sello distintivo.
Ven, camínala. Si así lo decides, la ecléctica mezcla de estilos constructivos, dinámicas culturales y tradiciones de la también Capital Iberoamericana de la Coctelería no te dejarán mucho espacio al sosiego.
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